Wednesday, March 11, 2015

La Explosión de la Era de las Maravillas

A media tarde tomé el vuelo a Chihuahua, fue la culminación oficial de una era, la Era de las Maravillas, de la cuál quedó constancia Aquí. En honor a la verdad hubo después otra visita no planeada poco después a Mérida, pero para mí las cosas acabaron en el norte, ese día.

Por cinco años estuve en la cresta de la ola: Trabajando como loco 15 horas al día, si. Modestia aparte, era el mejor. Y se debió a que había logrado encontrar algo que me encantaba hacer y era bueno haciéndolo. Muchas veces no podía creer que me pagaran por hacer eso.

Habré tomado un centenar de vuelos, muchos de ellos seguidos y algunas veces haciéndolo durante semanas. Visite por trabajo varios lugares en el país y fuera de el, conocí gente a todo lo largo y ancho de América, Europa y Asia.

Muchas de estas salidas se convirtieron en escapadas para conocer otros lugares y vivir otras experiencias.

Eventualmente me cayeron bien mis colegas y coincidir fuera era una toda una experiencia. Conocí infinidad de ciudades, restaurantes, bares, carreteras, aeropuertos, aduanas, pueblos polvorientos, selvas, manglares, desiertos, bosques y puertos.

Por primera vez en la vida tenía mas dinero que el justo para transportarme y comer. Aquello se volvió una sucesión de fiestas, experiencias y viajes sin fin. Todos mis pendientes los fuí cumpliendo uno tras otro.

Pero lo mas importante, tenía a mis amigos. Lo que pasó en esos años fue mejor de lo que pasó en todos mis años de vida previos.

Y sin embargo nada es para siempre, de algún modo aquella noche que llegué a Chihuahua tenía elementos suficientes para pensar que todo estaba por terminar.

Por supuesto las épocas no terminan de tajo un día y al siguiente es un nuevo ciclo de tiempo. Por el contrario, se empiezan a desmantelar hasta que no queda nada reconocible.

Eso fue justamente lo que siguió en meses y años posteriores a la última visita a Chihuahua. La Era de las Maravillas tenía agotado su combustible de estrella y fue como estrellar contra la pared un auto a 250 km/h.

Los miles de pedazos de mi frenética carrera salieron volando por los aires, lenta e inevitablemente.

A partir de allí todo fué lentitud, esperar. Reconozco que pude haber hecho un epílogo épico, pero mi nefasto manejo del dinero solo me dejó apenas para comer. Me tomaría unos años recuperarme de aquél golpe de derroche mortal.

Mi brújula se rompió en pedazos y por primera vez en mucho tiempo no supe que hacer de mi vida o a donde ir. Mis aliados se han ido reduciendo hasta quedar muy pocos.

Los días se volvieron largos, aburridos e interminables. Retomé este blog con mas frecuencia e incluso abrí un blog de fotos. Había quedado cautivo de la casualidad y de mis propias metidas de pata.

El hastío dió paso a un nuevo proyecto y de él conocí por primera vez la derrota profesional, Me cuestioné si lo que hacía realmente me gustaba. Y por mas que lo pedí solamente me quedé al borde del despido.

Dos años y medio fueron una larga noche.

El épico relato del paso por la Blogósfera

Así que contra todo pronóstico el blog creció y empezó a sumar seguidores. Primero a mi círculo mas cercano, luego el no tan cercano.

De pronto, todos querían abrir un blog con tecnología de punta de la primera década de los dos mil. Se sumaron mis amigos, mis no tan amigos y al final, sin sospecharlo estaba metido en una red de blogueros que sumaban audiencia

Tengo buenos recuerdos de aquella época, conocí a algunos blogueros y nos la pasamos bien. A su vez te enterabas de chismes de mas blogueros.

Una vez añadí una caja de tags y como dijo gaiardo se convirtió en un imán y ring de controversias.

Vaya que me gustaba tener audiencia . Era divertido publicar para alguien, aunque algunas veces los lectores llegaran a ofenderse y a tornarse indignados.

Recuerdo a los regios que hakearon la página de los pejezombies. El tiempo que colaboré en la página del sendero del peje. 

La vez que conocí a Maquiavélica y su amiga la osita. Los chismes del Niño Bomba. Cuando Plaqueta no era una diva de los medios y  llegó a comentar en mi blog. 

A Asmoday, Sirako, El Mareo.

A Zombie del Frasco Dewar y su página de Potente Decibel. Las fiesta fallida de Grunge Inc en los confines de la ciudad y el traslado improvisado a Tacubaya.

Ya un poco después, los blogs de Lust of Heaven, Mar de Sombras, Amanita Virosa y el inmortal blog de la Princesa que tanto nos hizo reír.

Los post con vacas astrales, fractales, política, vampiros, el tipo que me ganó la dirección del blog, Marte, Plutón, Cajas de Cereal.

La horrenda moda de hacer post "vaciladores" estilo Plaqueta. Los primeros, segundos y demás post del trabajo.



Luego vendrían los post de los viajes, anécdotas personales y los existencialistas.

Así que poco a poco el público fue abandonando este blog cada vez mas fuera de moda, cada vez mas anticuado y cada vez mas solo.

Muchas veces me negué a actualizar plantilla, no así los banners y el tag que ahora es mi timeline de Twitter (hubiera dejado el antigüo pero se llenó de spam y ya no servía para nada).

Hoy la blogósfera como llegó a ser ya no existe. Gracias a Twitter y Facebook. Y a que la gente prefiere escribir 3 líneas de estupideces que desarrollar ideas (aunque sean ideas inútiles, pero ideas al fin y al cabo). 

En un momento de ocio he visto que el grueso de los blogueros desaparecieron poco a poco de 2012 a 2013. Los menos asiduos a la "pluma" empezaron en 2011 y los mas testarudos a lo largo de 2014.

Hoy en día quedan muy pocos blogueros  activos y de ellos no he encontrado uno que valga la pena.

De algún modo o de otro este es el recuento de unas cuantas épocas, pasando de aquellos días en que solo importa lo que te diviertes con tus amigos a los otros donde necesitas tomar decisiones cruciales en tu vida.

Hoy solo me queda este blog vintage, no muy diferente a como se veía en el principio. Pero ha sido un gran viaje, gracias blog por todos estos años.

El Punto en la Zarpa del Gato

Estaba sentado a un lado de mi compañero al final de la tarde cuando abrió su sobre: Un punto.

Era la despedida de nuestro tiempo en la universidad, cada quién recibía un sobre que contenía una carta que se había escrito a sí mismo al inicio de todo aquél periplo cuatro y medio años atrás.

Un punto en el centro de una hoja blanca y me dijo que significaba mucho para el. No me lo explicó, ni pedí explicación alguna, pero respeto el hecho de que pusiese un punto final a aquel periodo de su vida.

En cuanto a mi, aquella cruzada había comenzado cinco años y medio atrás, me bajaron un año y aunque a pesar de eso estaba contemplado que recibiera mi carta, la misma no se encontraba entre las de aquél día.

Por trivial que parezca, aquél punto en la hoja blanca me motivó a buscarla por los meses siguientes, la estuve rastreando con una persona de buena voluntad que coordinaba todo aquél papeleo sentimental ( Por desgracia ya he olvidado su nombre, pero incluso hoy le sigo agradecido por la ayuda). Removimos sacos de cartas bajo el reloj y otros tantos en unas oficinas olvidadas recorriendo cada instancia, pero la dichosa carta no aparecía.

Aquél punto me hizo darme cuenta la necesidad que tenía de ponerle fin a ese periodo, aunque fuera de manera simbólica. Aquellos años, toda una montaña rusa de emociones y aventuras. Por intensos que hayan sido, por buenos y malos, debían terminarse para comenzar con un nuevo camino.

Fué por aquellos días llenos de incertidumbre que un amigo tenía un blog donde parecía que podía escribir cuantas cosas se le cruzaban por la cabeza (la mayoría sandeces, otro tanto eran mensajes políticos). Así que de pronto, sin proponérmelo y sin saber bien la razón, empecé a construir un blog propio.

Me tomó unos días aprender como funcionaba Blogger, como mover la plantilla, escribir y el resto me ayudó mi amigo (deberán saber que en aquellos días no era tan intuitiva la interfáz de Blogger), quién le dió el visto bueno a esto a pesar de que el título le pareció "muy gay".

Creo que nunca sabré si fue por una asociación inconsciente con la carta perdida en aquellas múltiples cápsulas de tiempo o si fué porque me di cuenta unos años tarde que los blogs existían y estaba rezagado, quizá fué porque simplemente me encantó la idea de poder escribir lo que quisiera. Tal vez fué un poco de cada cosa. Lo importante es que estaba escribiendo y me encantaba.

¿Que hay en la Zarpa del Gato?, no tengo idea. Como ya he dicho, no se muy bien porqué escogí ese título aunque vagamente puedo aludir al misterio, estrategia y elegancia que rodea a los felinos. Lo pude haber cambiado mil veces pero nunca lo hice, creo que Hemingway tenía razón cuando dijo que el título de la obra es la portada de la misma. No se si haya sido el mejor título pero creo que es una analogía de las decisiones que tomamos en la vida: Para bien o para mal, pero es nuestra.

Este (en aquél entonces) pequeño diario comenzado por puro ocio y sin propósito aparente, fué un pequeño bote salvavidas en esos tiempos aciagos. Primero un hobbie que temí desaparecería en cuanto encontrara trabajo por la falta de tiempo.

Por fortuna eso no fué así, por el contrario. El pequeño diario comenzó a crecer y a tener un público, por increíble que parezca.

Y ¿como finalizó el asunto de la carta extraviada?.

Tras varios meses de búsqueda, agotamos todas las instancias excepto una, un personaje prominente en esos grupos estudiantiles era la última esperanza y justo el día fijado no fuí por atender asuntos mas urgentes. Algo así como estar en la pelea por conseguir un trabajo y no morir de hambre. La verdad, es que ya no necesitaba la carta porque estaba empezando algo nuevo. Tenía un nuevo norte al cuál apuntar mi camino.

De algún modo estaba poniendo punto final sobre aquella etapa, lo que menos necesitaba era estar rondando la universidad y aunque me dolió no recuperar la carta, aprendí que cuando los astros terminan sus órbitas hay que ser lo suficientemente fuertes para dejar ir las cosas.

Cinco años y medio en aquél tiempo eran mucho para mí, sin embargo no por eso olvidé por completo el mensaje de la carta, donde quiera que se encuentre (ya sea que siga guardada en una oficina de la universidad o triturada y reciclada un millón de veces en cintillos de cartón de Starbucks) y la historia es mas o menos así:

Recuerdo que estaba escribiendo unas palabras insulsas de felicitación, un cliché. El cuál bien taché, bien ignoré. Solo para escribir lo que me pareció realmente importante después de escuchar a dos tipos también de nuevo ingreso, decir algo como que serían afortunados de terminar la carrera. Porque en ese momento no estaba seguro de que podría llegar a la mitad o siquiera pasar del primer semestre.

Así que lo que escribí a continuación, aún no lo he olvidado:

"Si estas leyendo esto es porque acabaste la carrera, misión cumplida".

Bueno, nunca lo leí pero si que acabé la universidad. Por cierto, ninguno de aquellos dos visionarios terminaron.

Tuesday, March 10, 2015

Cuentos desde el éter

Si una hipotética y curiosa persona se sentara conmigo frente a frente en una habitación cerrada con una mesa de por medio y un café humeante cada quién, probablemente no tendría el menor reparo en poner un muro de silencio entre nosotros.

Me concentraría en el buen o mal sabor del café y eso me llevaría a divagar a sudamérica, sumatra o algún café en europa. Existe la posibilidad de que eso me lleve a pensar en esmeraldas, los volcanes activos, el valor de las coronas noruegas. Quizá de allí a Java, los tipos de magma, las ganas que tengo de visitar un volcán activo, la relación de Noruega en la unión y europea.

¿Porque no seguir?:  Unión Europea-Crimea, Crimea-Sebastopol, Sebastopol-Tolstoi, Tolstoi-Dovstoievsky, Dovstoievsky-Stravisnky, Stravinsky-Bauhaus, Bauhaus-No Bauhaus, No Bauhaus-Münch, Münch-Arquetipos, Arquetipos-Jung, Jung-Terapias de electro choques, Terapias de electro choques-Sao Paolo, Sao Paolo-Grafittis con lenguaje codificado, Basnky es un perdedor.... Y así hasta que alguien me interrumpa o me de hambre o sueño.

Para bien o mal a estas alturas mi interlocutor ya se habría puesto incómodo o por lo menos aburrido. Sin mencionar que probablemente me tenga como grosero, descortés o autista.  Si me preguntara en que pienso, la respuesta sería: En nada.

Es una rutina que me ha sucedido un millón de veces.

Por el contrario, siempre he creído en el poder de las palabras. Me aturde la gente que habla sin parar contradiciéndose cada cinco minutos incapáz de tragar su propia historia. Creo que las palabras deben decirse solo cuando deben decirse, sean espontáneas o no.

Tanto lo creo que hace mucho tiempo sin saber bien porque, decidí abrir este blog.

Al principio no supe muy bien el porque o la misión de esta zarpa de gato. Ahora se que es parte para descansar mis corto-circuitos, parte para decir lo que considero importante, parte como terapia. Porque lo que me falta de lengua en el común de las situaciones, me sobra para escribirlo.

Y sin embargo he decidido ponerle un punto final en los próximos días, porque creo que toda buena historia merece un gran final.

Monday, March 09, 2015

Cleo

Han pasado algo mas de siete años y aún no puedo encontrar palabras suficientemente elocuentes y apropiadas para hacerle justicia a uno de los mejores amigos que tuve jamás.

Cleo (Cleopatra en inicio) pertenecía a una banda de perros callejeros, némesis de mi Alaska Malamute en algún punto entre 2001 y 2002. Era pequeña, joven, hiperactiva, con zonas negras y pardas, la cola enroscada y con una oreja caída cual can animado de Disney.

Me tomó una eternidad que aceptaran que se quedara en mi casa, pero al final se ganó su lugar.

Hoy en día me sigue sorprendiendo su nobleza, pues en los días mas oscuros estuvo allí reconfortándome a su manera siempre que la necesité, nunca me dejó.

Cuando se murió ya tenía este blog y sin embargo nunca escribí nada sobre ella. Creo que ha sido una gran falta de respeto y no fué solo por falta de palabras, creo que también es porque se trata de algo muy personal e invaluable.

Pero no quería terminar este blog sin antes presentarle mis mas altos respetos y admiración. Si pudiera hablarle una vez mas (suponiendo que me entendiera), creo que le diría:

Contigo tengo una deuda que jamás podré pagar. Fuiste mucho mejor amiga de lo que yo pude ser contigo. Te estaré siempre agradecido por todo lo que hiciste por mi y nunca te voy a olvidar. Gracias por ser mi amiga.












La maquinaria de mis relojes.

Hace mucho tiempo hice algo que nunca había hecho por que nunca antes había tenido dinero suficiente. Me di un regalo de cumpleaños: Un reloj de correa negra y esfera metálica.  

Aquél reloj me gustaba mucho, lo usé hasta que se le rompió la correa por el uso. Al ser un reloj Swatch su correa era única y aunque podía comprar una similar la idea nunca me gustó demasiado. Así el reloj quedó relegado al cajón del olvido.

Después vinieron una serie de relojes que usé durante largo tiempo. Hace algunos meses el último de la lista se estropeó y recordé al viejo reloj de correa negra. Lo saqué dispuesto a cambiarle la pila, la correa y usarlo.

Sin embargo al final decidí ponerlo a la venta, sin saber muy bien el motivo. A este se añadieron otros tres, unos lentes y una pluma Mont Blanc.

Hasta que un comprador me dijo que uno de los relojes era de manufactura Suiza y que casi lo estaba regalando, entonces me sorprendí. Pero no por el hecho de estar haciendo una mala venta, sino porque realmente no me importaba tanto deshacerme de el aún sabiendo de que se trataba. 

Fué así que me di cuenta que estaba deshaciéndome de cosas que en realidad no me pertenecían, aquellos objetos pertenecían a un yo de otro tiempo, con otras cosas en la cabeza y para esa época tuvieron un porqué e incluso una historia digna de recordar:

Por ejemplo: la pluma tenía una historia pintoresca de cuando me acompañaron a llevarla a grabar y los lentes los usé la primera vez que fuí a Río como todo un turista joven e inexperto. Todavía tengo la foto en el signo vial que conduce al Corcovado y estaba allí, sonriéndole al futuro sin poder creérmelo.

Sin embargo, ya no soy aquella persona que llevó a grabar la pluma bajo la lluvia o aquél tipo ingenuo visitando Sudamérica por vez primera.

Recientemente me preguntaron que cosas me llevaría a una isla desierta si no tuviera que preocuparme por la supervivencia, algo así como un destierro a Córcega. Creo que fuera de unos pocos libros y la música no necesitaría nada mas. Y aún así, eso podría dejarlo atrás en el último de los casos.

Fué así como de golpe entendí que para seguir avanzando, tenía que estar dispuesto a dejarlo todo si es posible. Entre lo que se cuenta este blog.

No había comprendido a quienes terminaban sus blogs, pues era el trabajo de muchos años en la mayoría de los casos, al menos hasta ahora. Unos fueron honestos y los cerraron porque aceptaban la autocensura que conlleva tener un público y otros porque ya no eran la misma persona.

Siempre pensé que el blog podría ir evolucionando a la par de los autores, pero veo que no es así. Aunque me encanta escribir aquí, esto se ha convertido en una cápsula del tiempo que constantemente me lleva a 2006 y a años subsiguientes. 

Cada vez que entro veo que ya no queda nadie mas que yo y eso me hace sentir demasiado fuera de lugar. Como aquél que se queda a limpiar después de una fiesta, porque este blog siempre estará  relacionado a lo que alguna vez fué y tiempos que ya pasaron. Si bien no es malo, lo difícil es mirar hacia adelante teniendo tantos años de historia y peso detrás.

El resultado es una serie de post melancólicos intermitentes sobre el pasado y ya no quiero seguir escribiendo eso, al menos no desde esta perspectiva. 

Ya no soy la persona que empezó esta cruzada en 2006. En aquellos años todo era incertidumbre, luego vino el "muchacho ejecutivo" que veían raro los señores de traje en los aviones mientras el aprendía los secretos del oficio. Hoy se que ni soy ejecutivo, ni lo fuí y ahora yo veo raro a los mas jóvenes. Mis intereses son otros.

Es verdad que este blog me ayudó a bordear periodos difíciles cuando lo comencé y otro mas recientemente. Sin embargo, creo que llegó el momento de ponerle un punto final a estos años.

Desde luego que no tiene comprador ni se vendería, pero tampoco pienso desaparecerlo. El blog seguirá aquí hasta que Blogger lo permita, como testigo de algunas de las grandes etapas de mi vida.

No me mal interpreten, me sigue encantando escribir los viernes, en los aeropuertos, en los cafés, pero sobre todo a media noche cuando todo está en calma y fuera de las notas abstractas del jazz antiguo solo queda la cabeza dando vueltas. 
 
Así que lo que sea que haga, donde quiera que esté. No dejaré de escribir los siguientes capítulos de este show al que llamamos vida.

Wednesday, March 04, 2015

Time Travelers

"Hola, lamento distraerte del recorrido diario hacia tu casa pero tengo que decirte algo. No se si me reconozcas, pero soy tu en 17 años. ¿Caminamos?".

Dejemos de lado el hecho de que hay grandes posibilidades de cambiar el pasado con una conversación así. Solo supongamos que lo puedo hacer y que no afectaría mi línea de tiempo y la entropía está de acuerdo con ello.

Esa es una de las conversaciones mas ansiada de mi vida, que cada ciertos años le doy vueltas. Sin embargo, a finales del año pasado la idea no me dejó en paz. Volvía una y otra vez.

Así que aunque no tengo un DeLorean con capacitor de flujos para viajar en el tiempo, si que tengo idea de que hubiera hecho a esa edad si mi yo del futuro se hubiese presentado.

Creo que lejos de sorprenderme simplemente diría "Hola, ¿porque tardaste tanto?"

Claro que de entrada hay una diferencia entre ambos yo. El joven querría saber porque método arcano fuí capaz de regresar en el tiempo y me preguntaría las posibilidades de dicho artefacto. Por otra parte, el yo viejo estaría mas interesado en hablarme del significado de la vida.

Al principio ambos se decepcionarían un poco por los intereses dispares, pero al final ambos se reconciliarían.

Pero el asunto no termina allí, quizá hablaría con mas yo en épocas diferentes. Mandarles mensajes claves para ayudarles a ver el objetivo al final de la carrera.

Al adolescente le diría que no dudara de si mismo, que las cosas entre tanto imbécil mediocre no son fáciles pero que va por el camino correcto y al final todo lo que alguna vez quizo lo habrá conquistado.

Al de hace 8 años lo interceptaría un día bastante específico, casi por la noche y camino a casa también. Quizá un poco antes, cuando estuviera en la bibloteca tratando de digerir lo indigerible para aquella última gran prueba. 

"¿Sabes amigo?, esto es un desastre. Luces terrible y todo parece una zona de guerra post-apocalíptica y aunque esto parezca el fin de la historia y que todo se ha terminado. Debes creerme que es solo el lento comienzo de un nuevo camino lleno de aventuras que ni en tus mas locos sueños imaginaste. 

Así que anda ya, repasa lo que tienes que repasar y termina con este último obstáculo para comenzar los mejores años de tu vida: Paciencia y Esperanza".

Creo que el último viaje, lo reservaría para el yo de hace 5 años. Sin embargo no le hablaría, seguramente le dejaría un papel con una sola frase: "Nada es para siempre".

El efecto práctico de hablarme a mi mismo hubiera sido para ahorrarme tanta incertidumbre y algo de angustia. Sin embargo, las decisiones que tomé las hice sin ningun spoiler del futuro; para bien o para mal.

Es paradójico, me gustaría hablarme a mi mismo. Pero si me evitara los golpes, tampoco sería la persona que soy ahora. Quizá una de las cosas buenas de esto es que no puedo arruinarme la sorpresa de que me deparará el futuro y eso hace la vida mas interesante.