Francia

Una de las tantas ridículas tragedias mexicanas es sin lugar a dudas el enamoramiento con Francia en todas sus formas y colores posibles.

Desde los que les escogen un "nombre francés" a sus hijos o mascotas, hasta los pseudointelectuales que solo ven "películas francesas de arte". Porque ser afrancesado es según parece elegante y sofisticado, una moda perenne remontada quizá desde antes del porfiriato.

Seré solo yo quien cuando conoce a una chica que digamos que se llama Monique y le preguntan si su nombre es francés, a lo cuál la chica responde orgullosa que sí. Simplemente me sucede unsentimiento de ironía chistosa al pensar que mejor debió llamarse Nahuatlaca?.

Que demonios tiene que ver un nombre francés para que estés orgulloso (a) de ello? te hace mas "francés"?.

No tienen menos mérito los pseudointelectuales que detestan el cine comercial porque es maligno y enajenante. Por lo que su contraparte gala debe ser interesante y facinante sin importar que tan aburrida sea la película, porque es "de arte" y solo por eso debe ser buena. Habeís visto como el director logró plasmar el dolor en la chica que sufre mucho?, como el mundo es injusto y los eventos de circundantes de su vida monótona viciosa moderna son tan eclécticos que llevaron a la protagonista a ser tan abyecta?.

O peor aún están los que dicen que les gusta el cine francés porque vieron y aman Amelié (con subtítulos en español); pura joya representativa del país del galo que lo represente exactamente como es, hasta en el Techicolor.

Con esto no estoy en contra de los filmes de por allá, pero el hecho de creer que todo es la quitaescencia del arte es absurdo.

Que decir de los que "aprenden francés" y andan por la calle diciendo Parlez vous francais? Je m´appelle.... con fingido acento de querer sacar una flema del pecho. Ah! porque saber francés además de intelectual te vuelve el seductor infalible no importa que tan mal pronunciado "hables" tu curso de básico 1.

Quizá en este punto me encuentre escupiendo hacia arriba, pero mis motivos son completamente diferentes, creo que siempre lo han sido. Entre las razones que me ha tocado escuchar al inicio de los cursos están las de que el idioma es elegante, que Francia es muy bonita, que la cultura francesa y vagatelas por el estilo.

Antes y después no han cambiado mis motivos, el dia que pueda leer a Baudelaire (sin necesidad de mi edición bilingüe) o al Conde ese día diré que ya sé el idioma. También por motivos mas mezquinos como pasarme unos buenos años en el norte.

Tal vez los pseudointelectuales mas divertidos (a la vez casi tan irritantes como los fans de Frida Kahlo y en muchas ocasiones son ambos) son los que tienen miles de postales de Van Gogh por que Van Gogh es "tan francés"! (pequeño error geográfico).

No dudo ni por un instante que París sea la ciudad mas bella de la tierra y que los tesoros, arquitectura e historia de Francia sean de los mas deslumbrantes, pero con todo y eso la supuesta cultura francesa está sobrevaluada de este lado del mar.