Wednesday, June 03, 2009

Para Ripley

Hoy en la mañanita recogí los resultados de mis análisis anuales. Los que tengo que hacerme desde que me tomé un martini radioactivo hace 3 años y que seguiré haciéndome hasta que vuele en mil pedazos en el aire o me acabe revolcando con la flaca.
Y a diferencia del año pasado son tan bonitos y perfectos como una rusa en pleno invierno. Mi colesterol ligeramente alto desde aquellos dias como efecto secundario, simlemente está en rangos normales gracias al ejercicio. Ya con eso valió la pena la chinga de un año.
Mejor aún: Para los que no lo sabían, desde mediados de la carrera cuando pedí mi crédito; me llevaron a un cuartito en la universidad donde un señor de barba de chivo, patas de cabra y largos cuernos rojos me hizo firmar con sangre que cedería la mitad de mi alma a la universidad por el favorcito y pagaría después mi atrevimiento con el sudor de mi frente por mil años.
Hace poco ví que de Horcrux en Horcrux que recupero cada mes, mi deuda increíblemente pasó de tres rechonchas y obscenas cifras a dos dígitos peso gallo.
Debería saldar ya mi deuda con el príncipe de la oscuridad, pero ñé. Hay cosas mas urgentes.

2 comments:

Aspacia said...

LARGA VIDA A ROSA!

Mar de Sombras said...

que curioso, yo había escuchado que un señor te había llevado a un cuartito en la uni, pero tenía entendido que para otra cosa...