Friday, August 05, 2011

La ciudad de los Campos de Dios

Reconozco que no quería regresar a Oslo, sus días lluviosos y sus heroinómanos inyectandose a cada esquina me ponían un tanto de malas. Aprovechando que mi itenerario se transtorno a fondo y en parte a las constantes decepciones de Escandinavia me puse a buscar un destino alterno y novedoso para fugarme.

Dublín, Budapest, Geneve, Berlín, Amsterdam estaban todos a la mano y a pocas horas. Mas sin embargo por fuerza tenía que tocar Estocolmo porque mi vuelo final comenzaba ahí.

Y si tocaba Estocolmo por fuerza pisaba Oslo.

Al final Oslo saco su buena cara aun siendo un día después del atentado.

Y sin embargo lo que encontré en Estocolmo me dejo perplejo: Una ciudad de belleza
Espectacular, tan grandiosa que rivaliza con la mismísima San Petesburgo.

Una ciudad de palacios casi utópica que ya huele al Báltico, realmente merece el sobrenombre de la capital de Escandinavia.

0 comments: