Los Quitenses se jactan de dos cosas: Vivir en el paralelo Cero y tener una gran variedad de climas (refiriéndose al tiempo atmosférico) en un solo día.

Fuera del sinfín de anécdotas laborales y de comprobar como la estupidéz humana es un factor necesario para aspirar a un alto puesto, es poco sobre lo que se puede decir de Quito. Según se dice para conocer una ciudad relamente uno debe deambular por sus calles, así que como Vago do Nacimento que soy me puse a deambular por la pequeña urbe, ya que a pesar de ser la capital del Ecuador su tamaño no es mayor al de León Gto.


Y que hice entonces?, pues ya ni modo, regresaba o seguía avanzando y me arriesgaba a que la ira de la heróica policía Ecuatoriana me apañara y me diera una golpiza por ser un cochino mexicano indocumentado en su poderosa nación... Chingue a su madre, mejor me arriesgo.

Y pues almenos ese dia no hubo mucho que ver, salvo que la versión ecuatoriana de Polanco es bastante sui géneris, por ejemplo su avenida importante es "Via la Mitad del Mundo", que original!!!.
Eso si, malditos. Ellos no tienen que sufrir el monopolio de Pemex.

Tal vez esto sirva para aclarar como la lógica Ecuatoriana es tan peculiar, ya que además de considerar que un aeropuerto en lo profundo del valle y a media ciudad es muy cool y defender grupos terroristas, han construído un monumento a la Televisión, TV Tiendas. Solo que existe un pequeño detalle, el local es en realidad una vinatería de mala muerte, que obvio no vende TV´s.



Solo que empiezo a pensar que al destino no le gusta que juegue al audáz ya que gracias mis fachas de turista y luego de discutir con un gringo que se había perdido y que me había pedido ingenuamente orientación, sobre si era o no seguro andar caminando por ahí. Como que me vió feo un poli y me empezó a seguir, así que como vil indocumentado me heché a andar rápidamente hacia el hotel, por suerte ya estaba cerca rehaciendo mis pasos. Llegando justo a tiempo a cobijo del Marriot para que la "migra ecuatoriana" se mantuviera a raya.
Esa noche hubo "Noche Colombiana" en el hotel (si, en Ecuador), a la que solo pudimos asistir unos pocos privilegiados, ya que los los otros o mas bien las otras se quedaron en el business center arreglando de urgencia su pequeño Frankenstein llamado Protocolo para la reunión del dia de mañana.
Claro que con la coctelería de la noche terminó la mayoría de los comensales bailando música andina; entre ellos el que escribe, solo que con la gracia de una res con síndrome de Kreutzfeld Jakob.
Esa noche hubo "Noche Colombiana" en el hotel (si, en Ecuador), a la que solo pudimos asistir unos pocos privilegiados, ya que los los otros o mas bien las otras se quedaron en el business center arreglando de urgencia su pequeño Frankenstein llamado Protocolo para la reunión del dia de mañana.
Claro que con la coctelería de la noche terminó la mayoría de los comensales bailando música andina; entre ellos el que escribe, solo que con la gracia de una res con síndrome de Kreutzfeld Jakob.
1 comments:
buenas fotos
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